¿Cómo se inicia el tratamiento médico en diabetes?
Es muy oportuno recordar que la diabetes es una condición que se relaciona directamente con la insulina, pues esta hormona, que se produce en el páncreas, se encarga de mantener la glucosa (azúcar) en la sangre dentro de rangos óptimos.
Cuando se vive con diabetes, la insulina no se produce, como en la diabetes tipo 1, o se produce de manera insuficiente, como en la diabetes tipo 2, adicionalmente, en la diabetes tipo 2 se presenta cierta incapacidad de las células para responder a la acción de la insulina.
La falta de insulina tiene como resultado la elevación de la glucosa en la sangre, lo cual se llama “hiperglucemia”. La hiperglucemia sostenida por mucho tiempo puede desencadenar las complicaciones de la diabetes. Por lo anterior, es muy importante que, desde el momento del diagnóstico, se implemente el tratamiento adecuado para cada persona.
Quienes viven con diabetes tipo 1 requieren de inyecciones diarias de insulina para mantener la glucosa en rangos adecuados, mientras que en la diabetes tipo 2 se puede usar insulina desde el principio, pero también existen varias opciones orales (pastillas) que permitirán que la insulina -que se produce- se aproveche al máximo. Actualmente existe una familia de medicamentos para el tratamiento de la diabetes tipo 2 que no son insulina, pero se inyectan igual que la insulina, se les conoce como GLP-1.
¿Cómo se inicia el tratamiento de la diabetes?
Como se mencionó anteriormente, el tratamiento de la diabetes tipo 1 se realiza con insulina desde el momento del diagnóstico y puede ser administrada a través de inyecciones o a través de un dispositivo llamado “microinfusora” de insulina.
El tratamiento de la diabetes tipo 2 normalmente se inicia con medicamentos orales (pastillas) y es posible iniciar con un solo medicamento, una o varias veces al día, y también se puede iniciar con más de un medicamento. También es posible iniciar con insulina o con los inyectables GLP-1.
En cualquier caso, es fundamental que se inicie, también desde el momento del diagnóstico, con cambios en el estilo de vida, es decir, mantener una alimentación saludable que incluya todos los grupos de alimentos en las porciones adecuadas, además de la realización de ejercicio (caminar, nadar, andar en bicicleta, bailar, etc.) durante, al menos, 150 minutos a la semana que pueden distribuirse en sesiones de treinta minutos cinco días a la semana sin dejar de hacer ejercicio por más de dos días consecutivos.
Debes considerar que el médico revisará tu tratamiento con frecuencia y determinará si es necesario hacer ajustes en la dosis, cambiar el medicamento o agregar un medicamento más. No te preocupes, esto no significa que hiciste algo mal o que la diabetes empeoró, solo debes tener presente que la diabetes va cambiando con el tiempo y que es necesario hacer cambios en tu tratamiento. No es conveniente que dures muchos años con el mismo medicamento.
Es probable que tu médico te prescriba otros fármacos, pues es muy importante manejar adecuadamente otras situaciones de salud que en ocasiones acompañan a la diabetes, por ejemplo: sobrepeso u obesidad, presión arterial elevada, colesterol y triglicéridos elevados, etc. Para que todos tus parámetros sean óptimos deberás seguir las indicaciones de tu médico y no olvidar que los cambios en el estilo de vida juegan un rol fundamental no solo en el control de la diabetes, sino también de estas condiciones asociadas.
Una recomendación muy importante para iniciar adecuadamente el manejo de tu diabetes es tener un programa de educación en diabetes, pues este será fundamental para que inicies y mantengas los cambios en el estilo de vida. Si usas insulina o un fármaco inyectable la educación en diabetes será imprescindible para que adquieras las herramientas y desarrolles las habilidades necesarias para aplicar las inyecciones con una técnica adecuada, de tal forma que tus medicamentos sean aprovechados y funcionen correctamente.
¿De qué depende la elección del tratamiento?
La elección del tratamiento debe individualizarse, es decir, debe ser diferente para cada persona, y esto se determina de acuerdo con las características de cada uno: edad, duración de la diabetes, la presencia de otras condiciones de salud (como sobrepeso u obesidad, presión arterial alta o colesterol y triglicéridos elevados), etc.
En cualquier caso, el médico es quien debe determinar la mejor opción de tratamiento para cada persona, así como las dosis adecuadas, además, realizará los ajustes necesarios en las dosis o, si es necesario, cambiará el medicamento o agregará otro. No olvides que el hecho de que un familiar o un amigo tenga cierto tratamiento y le funcione, no significa que te funcionará a ti, pues todas las personas somos diferentes y tenemos necesidades diferentes, por eso, es tu médico quien debe determinar tu tratamiento.
¿Qué opciones de tratamiento existen?
Actualmente existen muchas opciones para el tratamiento de la diabetes tipo 2, algunas de estas opciones son:
-Sensibilizadores a la acción de la insulina: estos ayudan a que la glucosa pueda ingresar mejor a las células y se convierta en energía. Un ejemplo de estos medicamentos es la metformina y, de acuerdo con las guías médicas, es el medicamento ideal para iniciar el tratamiento de la diabetes tipo 2.
-También existen los secretagogos de insulina, que se encargan de estimular la secreción de insulina por el páncreas (recuerda que en la diabetes tipo 2 la secreción de insulina es insuficiente).
-Entre los más recientes se encuentran los GLP-1, que son medicamentos que se inyectan igual que la insulina, pero no son insulina, y tienen muchos beneficios en el control de la diabetes.
-Dentro de los más recientes contamos también con una familia de medicamentos que ayudan a que la glucosa excesiva se elimine a través de la orina.
-La insulina es otra de las opciones en el tratamiento de los diferentes tipos de diabetes. Existen varios tipos de insulina, pero siempre deberá ser tu médico quien decida el momento de utilizarla, así como el tipo de insulina y las dosis.
¿Cuál es el mejor fármaco?
Todos los fármacos tienen diferentes beneficios y todos son muy buenos para mantener la glucosa dentro de los rangos adecuados (algunos con beneficios adicionales), pero el mejor fármaco para ti es el que mejor se adapte a tus características y necesidades. Recuerda que es tu médico quien determinará la mejor opción para ti.
Recomendaciones:
· Revisa tu receta antes de salir del consultorio y pregunta a tu médico todas tus dudas.
· Guarda tus medicamentos en un lugar seguro y siempre en el mismo lugar.
· Conserva tus medicamentos en su caja original.
· No suspendas tu tratamiento, aunque te sientas bien (te sientes bien por el efecto del medicamento).
· Informa a tu médico si te sientes mal o tienes síntomas inusuales y piensas que es por el medicamento (efectos secundarios).
· Pon alarmas o usa aplicaciones para que no olvides las tomas de tus medicamentos.
· Puedes hacer un calendario en un cuaderno, lo importante es que te sirva para organizar tus tomas y no olvidarlas.
No olvides que:
· El tratamiento es personal.
· El medicamento no funciona solo, va de la mano con la actividad física y la alimentación.
· La diabetes es cambiante, el tratamiento siempre requiere de ajustes.
· El médico es el único que prescribe y modifica el tratamiento farmacológico.
Elaboró: Dra. Marcela E. Vega García
Referencias:
1. American Diabetes Association. 9. Pharmacologic approaches to glycemic treatment: Standards of Medical Care in Diabetes 2021. Diabetes Care 2021;44(Suppl. 1): S111–S124.
2. Federación Internacional de Diabetes. Atlas de la Diabetes de la FID, 9ª edición. Bruselas, Bélgica: Federación Internacional de Diabetes, 2019.
3. International Diabetes Federation. Recommendations For Managing Type 2 Diabetes in Primary Care, 2017.
4. PROYECTO de Norma Oficial Mexicana PROY-NOM-015-SSA2-2018, Para la prevención, detección, diagnóstico, tratamiento y control de la Diabetes Mellitus.